Una historia llena de recuerdos

Crecer es parte de la vida, y aunque no queramos siempre habrá un momento en que deberás dejar todo por cumplir tus sueños aunque, nunca hay que olvidar lo que en verdad importa. Eso es lo que le pasa a Andy, habiendo ya terminado la escuela, decide dar un nuevo paso en la vida y es irse a la universidad. Más que la preocupación de su mamá y hermana, hay otros pequeños amigos que se sienten del todo dolidos por su partida.

Ha pasado mucho tiempo ya desde que Andy dejo de jugar con sus juguetes y aunque él no lo crea ellos lo extrañan mucho. Tras varios intentos de llamar la atención de Andy,  Woody, Buzz y los juguetes que no habían sido vendidos se dan cuenta de que es inútil, pues Andy ha perdido todo interés en jugar. Andy decide que lo mejor será guardar sus juguetes en el ático, pero tras una confusión, estos se encuentran en una bolsa en la esquina en donde dejan la basura. Tan desesperados estaban de salir de aquella funda que la rompieron y lograron salir. No tenían otra salida más que meterse en la caja de donaciones para una guardería.

Al llegar un oso llamado Lotso y Ken les mostraron el lugar;  todos estaban fascinados con la idea de quedarse menos Woody, que cree que la lealtad a su dueño lo es todo. Woody logra escapar pero hubo varios factores que le hicieron parar en la casa de una niña,  Bonny. Luego de un día de juego Woody logra averiguar que la guardería Sunny Side, no es lo que parece, todos los juguetes son malos, y las posibilidades de salir son nulas. Woody decide volver una vez más a la guardería para rescatar a sus amigos, pero las seguridades han aumentado, la guardia ha aumentado y para colmo llegan a cambiar a Buzz hasta hacerle uno de sus aliados. Nuestros juguetes preferidos crearán un plan para lograr escapar, haciendo de esta historia divertida y chistosa.

Una gran comedia animada para mirarla en familia, te traerá buenos recuerdos, de aquellos días de la infancia en donde toda la vida parecía un juego. Tantas sonrisas olvidadas volverán a nacer en ti, pues jamás olvidaremos todas esas grandes aventuras que vivimos con nuestros amigos más cercanos… los juguetes.

Por: Maria Jose Mejia